Maratón de Valencia 2017: Desde el otro lado.


Largos meses de preparación, días de entreno plenos de optimismo otros no tanto, continuas ausencias en el ámbito familiar, domingos de madrugones con la ilusión de que llegue el día, desgaste físico aunque sobre todo mental, continua evaluación diaria de los achaques que te hacen temer lo peor y muchos muchos km en las piernas..... en definitiva esto es preparar  un MARATÓN.
En tres fases clasifico yo esta bendita locura, decidirte, prepararla y correrla. La primera la mas valiente, la segunda la mas difícil y la tercera la mas bonita.
Es lo mas difícil que hay, su preparación, correrla es otra cosa, correrla es la recompensa con creces a todo lo anterior, es un cúmulo de sensaciones y sentimientos que nadie que no la haya corrido podría expresar, nada es comparable a lo que se siente antes, durante y al cruzar la meta.
El pasado sábado 18 de Noviembre 16 componentes del Club de Atletismo Amo Alla; Isabel Araque, Fátyma Azzaharaa, Paco Cordón, Antonio Muñoz, Manolo García, Iban Bonilla, Antonio Prieto, Paco Toscano, Antonio Toscano, Andrés Rubio, Moises Guerrero, Eugenio Tendero, Javier Maestre, Ibrahim Boualla, Javier Recio y quien escribe,  pusieron rumbo a la Ciudad del Turia, a la ciudad del Running, un incomparable marco para afrontar un reto de tal envergadura. A las 10:50h partía al AVE rumbo a la estación Joaquín Sorolla, pude comprobar caras de plena felicidad, ojos brillantes, ilusión y muy buen ambiente vaticinio de un radiante fin de semana. Ocupábamos hasta cuatro vagones con los componentes repartidos entre ellos. Pude visitar a todos y cada uno de los grupos, en uno se respiraba tranquilidad incluso hasta tiempo dio para dormir un ratito, en otro la conversación acaparaba experiencias, lesiones, en el otro no paraban de charlar y bromear teniendo al vagón en revolución y en el mío era calma, estrategias de carrera..... eran casi las 15:00h. El viaje pasó en un ¨plis-plas”.
En la puerta de la Estación y tras la pertinente foto colectiva, cada grupo puso rumbo a los cuatro campamentos que teníamos alquilados junto a la Ciudad de las Artes y las Ciencias.
Paco, Antonio T, Andrés, Antonio P, Iban y yo buscamos un sitio donde comer bien y rápido y así fue, una primera carga de hidratos para la mayoría, con un delicioso arroz meloso.
Tras la comida y ya paseando por las grandes y agradables avenidas de Valencia, acercándonos al majestuoso complejo de Santiago Calatrava, empecé a notar entre los compañeros cierta inquietud, nerviosismo. Cuando recogieron el dorsal confieso haberme sentido raro, extraño, la maldita lesión había frustrado mis deseos. La feria del corredor nos esperaba, abarrotada de gente, stand y mas stand de material de atletismo y en directo Radio Maratón con la intromisión espontánea y divertida de nuestro Andrés Rubio con Martín Fiz.
A las 21:00h era la hora reservada en el Restaurante Italiano, allí nos sentamos antes de tiempo, cansados la verdad, deseando engullir para ir a reposar pero entre que Isa y Moises no llegaban, el camarero no era muy Gaditano y la carta no había quien la entendiera, la cena fue estupenda solo gracias al buen ambiente reinante. Terminada la cena fui consciente que, a excepción  de mis compañeros de piso, al resto ya no los vería hasta acabar su hazaña o a lo sumo durante ella.
Una vez en el piso sobre las 23:00h, llegó el momento de sortear las camas, yo solicité dormir en el sofá, el sorteo no fue del todo satisfactorio para todos y ello provocó las risas previas al sueño. Cada cual fue a sus aposentos, me desperté varias veces en la noche, nervioso, triste.... a las 6:00h escuché al primero levantarse. Preparaban su ropa, dorsal, zapatillas, ….. yo me hacía el dormido, me sentía mal pero me propuse antes del viaje, mostrarme alegre y animado y llevar la procesión por dentro.
Llegamos andando hasta el guardarropa, en el camino nos cruzamos con Brahim que ya calentaba motores. Como buen asiático, cámara al cuello y mochila al hombro, tenía la intención de estampar para el recuerdo a todos los valientes maratonianos . Una vez en el guardarropa, me despedí de todos ellos y me di la vuelta solo esquivando a una marea impresionante de corredores nerviosos. Me dirigí hacia el puente Monteolivete desde donde quería ver la salida y gritar a mis héroes.
A las 8:30h en punto dio comienzo la salida, fue increíble, el puente literalmente vibraba, parecía que se iba a desplomar. Estaba super nervioso y hacía un frío tremendo....me puse de pie sobre el quitamiedos, cámara en mano, pero me llamaron la atención, estaba como loco buscando camisetas blancas y rojas y mi gozo en un pozo, solo vi a Iban y a los Antonios, les grité con todas mis fuerzas. Seguía y seguía histérico mirando por todos lados para no conseguir ver a nadie.
Tras 30min viendo la salida, hice mis cávalas cronológicas y rápidamente me fui al sitio mas cercano para ver llegar a Fatyma en el 10K, me situé justo donde empieza la famosa alfombra azul, a 300m de la meta, cuando la vi aparecer apenas atinaba a echar fotos, quería animar a la vez que fotografiar. Traté de buscarla para irnos juntos a ver al resto pero no dí con ella.
Pasmado de frío crucé el puente y buscaba desesperado una cafetería donde, sobre todo, tomar una infusión que me hiciera entrar en calor. Junto al km 25 desayuné y justo ahí decidí verlos pasar.
Con una organización excelente en todos los sentidos y las calles llenas de gente, me descargué de la app de la organización el dorsal de cada uno, de esta manera tenía a todos controlados, sabía por cual km transcurrían y así se me haría mas fácil verlos. Esa era la teoría que no la practica. El primero en ver fue a Brahim, rodaba con su particular gesto de concentración, solo, nadie le acompañaba. Según la app a Eugenio, Javi, Carlos, Recio y Paco les quedaba poco por llegar a mi altura, desde lejos vi llegar a Javi, Eugenio y Carlos, les acompañé corriendo 10m y traté de transmitirles fuerza, a los pocos metros llegaba Recio, fácil de localizar desde lejos. Paco apenas 1km tras Javier Recio. A unos cientos de metros, el hombre con mas maratones de Aguilar y su siempre limpia sonrisa, Manolo García. Los siguientes debían ser Iban, Antonio Prieto, Antonio Toscano y Paco Cordón. Ya se hacía muy complicado verlos, pasaban muchos corredores a la vez. Sin embargo los vi, grité y grité sin parar, me hacían señas palpándose el lado izquierdo de su pecho. Se hacía imposible mantenerme en ese punto, la policía nos desplazaba porque la serpiente humana era demasiada ancha y densa. En esa misma glorieta, atravesando el Turia por el puente  llegaba justo al km41, hasta allí me fui. Era mas difícil todavía, muchísima gente queriendo ver a sus héroes, las caras de lo corredores por ese Pk eran un poema. Volví a ver a muchos del club pero tenía especial interés a quienes me faltaron ver antes. La batería del móvil estaba al 10%, la app me decía que Antonio Muñoz, Isa, Moises y Paco Cordón estaban cerca. Ya llevaba en ese sitio casi 2h y no los veía. La aplicación me dijo que estaban en el Pk41 por lo que si no fallaba ya habían pasado delante de mis narices... Es mi única espina clavada, no los vi, no les pude transmitir fuerza.
Cabizbajo me fui andando hasta la zona de llegada, teléfono en mano con la batería casi agotada hice alguna llamada para ir al encuentro de, al menos, los compañeros del piso.
El viaje de vuelta fue como correr 3 veces más los 42.197m, en la mente de cada uno. La cafetería nos invitó a unas nuevas sonrisas y un brindis por el próximo año. Especial mención se tuvo por los caídos en la batalla del duro entreno, Jerónimo y José Luis.
Hubo variedad de anécdotas, variedad de detalles solo a la altura de gente de una talla insuperable. De entre ellas; Antonio Prieto se hizo con dos medallas al llegar a meta para después entregármela diciendo; “tu también la mereces”. Antonio Toscano no solo recorrió los 42.197m sino que corrió en sentido contrario unos 200m en busca de su compañero Paco Cordón al cual estaban atendiendo en una ambulancia fruto de los calambres.
Desde el primero al último mi mas sentida enhorabuena. Para la historia del Club y orgullo de todo Aguilarens@s, varios datos, ISABEL ARAQUE se ha convertido en la primera mujer en cruzar la meta de un maratón, casi nada, FELICIDADES, a pesar de las adversidades lo has conseguido. BRAHIM se ha convertido, con creces, en el atleta con  mejor marca de la historia del Maratón a nivel local y como no el doctorado de Moisés Guerrero, Antonio Muñoz, Eugenio Tendero, Javier Maestre y Antonio Toscano, luchadores de bandera.


El 2 de diciembre de 2018, Valencia nos espera.

por Agustín Romero

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