Orgullosos de ti, Yolanda.

Eran las 17.00h de la tarde del sábado 9 de marzo cuando acompañábamos a Yolanda al Campeonato de Andalucía celebrado en la pista cubierta de Antequera. Participaba en la final de los mil metros lisos. Necesitaba sentir nuestro calor y que fuese como fuese, estábamos orgullosos de ella y del gran trabajo hecho. Yolanda estaba nerviosa y los nervios se palpaban en el ambiente. Los participantes recogían dorsales, unos recibían instrucciones,  mientras otros pasaban a la zona de calentamiento. El ambiente que se vivía en esa pista era fabuloso, estaba lleno de ovaciones hacia los jóvenes participantes, no era para menos. Pocos atletas tienen la suerte de pisar esa pista. 

A las 18.00h aproximadamente Yolanda, junto con su padre Pepe, pasaban a calentar. Pepe le daba las últimas instrucciones para que luchase e hiciese la mejor carrera posible porque el buen trabajo lo tenía hecho. Había entrenado cada día, dando lo mejor de sí misma y ese esfuerzo tendría su recompensa. 

Llegaban las 18.40h cuando las chicas participantes se asomaban a la escalera que daba a la pista para participar en su prueba. Pasaron a la línea de salida, posicionadas todas, Yolanda salía de una de las últimas calles. Pistoletazo de salida, arrancan las doce chicas participantes y cada una empieza a buscar su sitio por la calle uno. Yolanda encontraba su lugar, aguantaba el ritmo y recibía todo el calor y apoyo desde la grada. Eran 5 las vueltas que tendría que dar. El grupo de doce corredoras quedó dividido, en primer lugar, iba un grupo de cuatro corredoras y detrás otro, situándose Yolanda en mitad de ambos. Ella quedaba, como suelen decir algunos corredores, en tierra de nadie, iba a costarle mucha fuerza mental, aparte de física, ya que no tendría a nadie que tirase de ella y le facilitara esas cinco vueltas. Pero ahí estaba, manteniendo el ritmo e intentando coger al primer grupo.   

Yolanda llegaba en una muy buena quinta posición con un tiempo de 3:14:03, habiendo bajado de los 3:16:25 de febrero en la misma pista. Las horas de entreno habían dado su fruto. Ella se sentía decepcionada con su marca, pero es un gran tiempo del que puede sentirse orgullosa.  

Desde el Club de Atletismo Amo Allá felicitamos a Yolanda por su gran participación y sobre todo a su familia, en especial a su padre, por todos los kilómetros que lleva en sus zapatillas acompañando en cada entreno y en cada salida a su hija. 

Tu club está orgulloso de ti y te acompañaremos en esta larga carrera llena de éxitos.  

Por Gloria García Muñoz.